El dominio de los atletas etíopes marcó de nuevo el maratón de Boston, cuya 119 edición se disputó este lunes y ganó Lelisa Desisa, seguido por su compatriota Yemane Adhane Tsegay. El tercer lugar fue para el keniano Wilson Chebet, que al final no pudo con el tirón que dieron los dos corredores etíopes, que estuvieron solos en la lucha por el triunfo.

La maratón de Boston, la más antigua de entre las pruebas actuales de 42,195 km, celebra este lunes su 119 edición, pocos días después de cerrarse el juicio por los atentados que hace dos años asolaron esta mítica carrera y con un reto ilusionante pero difícil: ver a un estadounidense repetir la gesta de Meb Keflezighi, que se convirtió el año pasado en el primer atleta local en ganar la prueba desde 1983.

La keniata Rita Jeptoo, ganadora de los maratones de Boston y Chicago en las dos últimas ediciones, ha dado positivo en una control antidopaje fuera de competición, según comunicó este viernes la Federación de Atletismo de Kenia.

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Meb Keflezighi se ha impuesto este lunes en la 118ª edición del maratón de Boston con un tiempo de 2:08:37, la segunda mejor marca lograda por un estadounidense en esta carrera, que no ganaba un atleta local desde el año 1983. En la categoría femenina la victoria se la llevó la keniana Rita Jeptoo con un crono de 2h18.57, su tercer triunfo en esta ciudad tras los conseguidos en 2006 y 2013.

La policía estadounidense ha detonado dos explosivos situados junto a la meta del maratón de Boston y ha detenido a una persona que podría estar relacionada con este suceso, coincidiendo con el primer aniversario de la tragedia, que dejó tres víctimas mortales y 264 heridos.

Los organizadores del maratón de Boston han anunciado esta semana nuevas normas y restricciones para poder competir en la famosa carrera, tras el atentado del pasado 15 de abril de 2013, cuando dos explosiones provocaron la muerte de tres personas e hirieron a otras 250.

Frank Fumich y Matt Nelson son dos amigos aficionados a la ultradistancia que quedaron muy conmovidos al enterarse de la explosión de las bombas colocadas el pasado mes de abril en la línea de meta del maratón de Boston, ya que creen que sus familias podrían haber sido víctimas de ese atentado en caso de que ellos hubieran participado en la competición. Por eso decidieron recaudar dinero y entregarlo a los afectados de la tragedia, con la particularidad de que lo harán personalmente tras recorrer la distancia de 450 millas (unos 725 km) que separa Washington D.C. de Boston.

Los corredores del Maratón de Boston que no pudieron finalizar la competición el pasado mes de abril debido a las explosiones de bomba que se produjeron en la línea de meta tendrán la oportunidad de volver a participar el próximo año, según comunicaron ayer jueves los organizadores.

Ignacio Iturriaga y Mikel Echavarren son dos de los 91 españoles que participaron en el maratón de Boston del pasado lunes y fueron testigos en primera persona de las explosiones que provocaron la muerte de tres personas y dejaron cerca de doscientos heridos. Un minuto después de que cruzaran la línea de meta, se produjo la primera explosión.