Un tercio de los consumidores de 'wearables' deja de lado estos dispositivos a los seis meses, según ha revelado una encuesta realizada por Endeavour Partners en Estados Unidos. Asimismo, ha destacado que mientras que uno de cada diez estadounidenses posee un dispositivo para monitorizar la actividad física o 'activity tracker', la mitad de ellos no lo usa.

El estudio ha planteado cuáles pueden ser los problemas a los que se enfrentan los 'wearables'. En el caso de los 'smartwatches', una de las causas del rechazo apunta a su adquisición como complemento, pero sin una necesidad real. Ha ocurrido por ejemplo con el Gear al ser incorporado al mismo tiempo que un Galaxy Note 3, que incluía una herramienta que cumplía la misma función para monitorizar la actividad física, como ha recogido el diario The Guardian.

Otro de los problemas para el uso de 'smartwatches' aparece cuando los compradores realizan la adquisición de forma aislada, pero el dispositivo acaba por no cumplir con sus expectativas. También se quedan obsoletos muy pronto por la aparición de un nuevo modelo, mejorado y con una estética más aceptable, como de hecho ha ocurrido con Gear.

Aburrimiento

En la misma línea, otra encuesta realizada por CCS Insight sobre más de 1.500 usuarios de 'smartphones' de Estados unidos y Reino Unido ha señalado que el 65% ha oído hablar de los 'smartwatches' y el 50% conoce la existencia de los dispositivos de monitorización.

Sin embargo, de entre quienes poseen uno de estos dispositivos, el 40% ha dejado de usarlo. En esta línea, según el estudio de Endeavour Partners, la mitad de quienes se han hecho con un rastreador de actividad no lo utiliza nunca.

El segundo estudio ha recogido como posibles causas del abandono de los 'wearables' que los usuarios de estos dispositivos han acabado por aburrirse de ellos o, simplemente, se han olvidado de ponérselos porque las funciones que ofrecen no son realmente útiles, puesto que ya las integran los teléfonos móviles que siempre llevan encima.