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miércoles, 08 de mayo de 2024 00:00h.

Cuatro consejos esenciales para participar en carreras nocturnas

La llegada del verano favorece la proliferación de carreras que se disputan en horario nocturno o transcurren a lo largo de la noche para que los participantes no deban soportar temperaturas excesivamente elevadas. Estas pruebas suponen para el runner todo un reto, ya que varían nuestros puntos de referencia y nos hacen evolucionar fuera de la zona de confort, pero también conviene tener en cuenta ciertas consideraciones para evitar contratiempos inoportunos. La web de la firma Kalenji nos ofrece cuatro consejos básicos.

Foto: Kalenji

1. Dar importancia a la calidad del equipamiento. La noche es hostil, o al menos ésta es la percepción que tienen de ella quienes la pasan corriendo, sobre todo si es la primera vez. Correr en la oscuridad requiere estar perfectamente equipado.

Ante todo, conviene ver y ser visto. La linterna frontal (o gorra linterna) será tu compañero a lo largo de la noche, por lo que no dudes en gastarte algo más de dinero y prevé pilas de recambio. Luego, compra el material aconsejado (el indicado por los organizadores): silbato, manta de supervivencia, móvil... Y si temes pasar frío, lleva guantes, gorro y un cortaviento. Piensa también en el avituallamiento y en la manera en que vas a administrar tu alimentación durante la carrera.

 

2. Reconocer el recorrido de manera meticulosa. Se trata de un paso absolutamente necesario, y más ahora que existe la posibilidad de obtener de forma sencilla información previa a la carrera: desnivel del terreno en los diferentes puntos del trazado, naturaleza del suelo, colocación exacta de los avituallamientos y de los puestos de primeros auxilios...

También es interesante aprenderse de memoria el esfuerzo que te espera. No olvides que la oscuridad trastornará tus puntos de referencia y que nunca se es demasiado prudente.

 

3. Respetar las consignas de seguridad. Las carreras nocturnas están a menudo precedidas por numerosos mensajes destinados a los participantes: meteorología, naturaleza del terreno, precauciones a tomar... Obedecer las consignas de seguridad de los organizadores es un simple reflejo de sentido común.

No les culpabilices si son excesivamente prudentes. Sigue tu instinto y no dudes en tomarte tu tiempo para preguntar a los voluntarios presentes en el recorrido, acudir a los equipos de primeros auxilios en caso de malestar o mareo, o llamar al número de emergencias que suele estar disponible en esta clase de pruebas.

 

4. Aprende a conocer tus límites. Es probable, si participas a una carrera nocturna, que la distancia sea consecuente y que ésta proponga una parte incierta. El viaje es ante todo interior ya que la relación con lo que se ve se limita a unos metros iluminados por una linterna frontal.

Saber apreciar tus límites, de la manera más precisa posible, es indispensable para administrar tu esfuerzo y evitar tomar riesgos. A ser posible, quédate cerca de algunos corredores. Y, sobre todo, conserva todos tus sentidos en alerta. Comprobarás que correr de noche siempre es una experiencia realmente extraordinaria.