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domingo, 12 de mayo de 2024 00:00h.

Senda del Mercadillo, en el Parque Nacional de los Picos de Europa

Dentro del Parque Nacional de los Picos de Europa, la Senda del Mercadillo tiene una longitud de 13,2 kilómetros (el doble, si decidimos hacer ida y vuelta), un desnivel positivo de 831 metros y un desnivel negativo de 692 metros. Se trata de una ruta que discurre por los caminos que utilizaban los vecinos de Valdeón para acudir a las ferias y mercados de ganado de la cercana comarca de Liébana.

Fotos: Turisleon.com

El recorrido tiene un enorme valor paisajístico, ya que va ganando altura poco a poco hasta alcanzar inmejorables vistas de los valles de Valdeón y Camaleño. También supone una aproximación a las zonas donde habitan algunas de las especies más representativas del Parque Nacional, como el oso, el lobo o el rebeco.

El trazado completo es una travesía y, por tanto, se puede hacer en uno u otro sentido, lo que implica tener en cuenta el regreso al punto de partida si es necesario recoger el vehículo. Si se opta por ir y volver por el mismo camino hay que considerar que son unas 9 horas de trayecto.

Esta ruta, además, permite aproximarse al collado de Remoña, desde donde se enlaza con la senda que sube hasta la Vega de Liordes, la cual requiere buena preparación física al ser larga y de gran desnivel (unas 8 horas ida y vuelta).

 

Otra variante

Existe una variante señalizada de esta ruta, iniciando el recorrido en Santa Marina de Valdeón. En este caso, la senda completa hasta Fuente De se puede hacer en 3 horas y 45 minutos (7 horas y 30 minutos ida y vuelta). También se reduce así la opción de ir y volver a Liordes (6 horas y 30 minutos).

Por último, se puede subir al collado de Remoña desde el sendero que sale de Prada y bajar por Santa Marina por la variante y luego, desde ahí, regresar por carretera de nuevo a Prada, cerrando así un circuito completo por el valle del río Arenal (unas 5 horas el recorrido íntegro).

En cualquiera de los casos, algo que no debemos pasar por alto son las magníficas vistas desde cualquier punto de la ruta, así como el contraste de las formaciones calizas de los Picos de Europa con la roca silícea de la Cordillera Cantábrica.