Según se desprende de su página web, algunas investigaciones demuestran que los líquidos ligeramente azucarados y con distintos y buenos sabores nos hacen beber entre un 45% y un 50% más en comparación con el agua, por lo que existen mayores probabilidades de evitar la deshidratación.

Por otro lado, el sabor y la temperatura son dos características importantes que marcan la diferencia en la cantidad de líquido que ingerimos. Sin darnos cuenta, es posible que no estemos bebiendo lo suficiente para restablecer el equilibrio hídrico de nuestro cuerpo después de hacer ejercicio.

Si se trata de actividad física de alta intensidad durante más de 30 minutos, o durante más de 60 minutos a cualquier intensidad, beber Powerade ION4 ayuda a evitar la deshidratación y aportar energía rápidamente a los músculos para mantener el rendimiento.

Los estudios científicos realizados con voluntarios para la ingesta de líquidos en varias disciplinas demuestran que los deportistas normalmente sustituyen entre un 30% y un 70% del sudor que pierden mientras hacen ejercicio físico. Para ayudarnos a combatir la deshidratación, Powerade ION4 se presenta con tres sabores diferentes: Ice Storm, Blood Orange y Citrus Charge.