Buscar
jueves, 02 de mayo de 2024 00:04h.

Un trail runner pisa una trampa con clavos oculta en un sendero del monte Neveral, en Jaén

Blas López Palomo es de Jaén y practica habitualmente la carrera por montaña. El pasado 8 de junio realizó un entrenamiento junto a varios miembros del Club Emotion Hunday por el monte Neveral. Cuando estaban a punto de culminar la ascensión a la zona conocida como el Kamikaze, antes de la bajada hacia el Megatín, sintió un pinchazo en la planta del pie. Lo que descubrieron medio oculto en el suelo les dejó atónitos e indignados.

Fotos: Blas López Palomo (Facebook)

Ese mismo día, Blas López denunció públicamente su experiencia y subió varias fotografías del incidente a su perfil personal de Facebook. En las imágenes se puede apreciar la trampa que algún impresentable había colocado en mitad del sendero: una tabla con siete puntas afiladas de unos 15 centímetros de longitud, camuflada entre el suelo y dispuesta para que alguien se las clavara con unas consecuencias que podían haber resultado bastante graves.

“Íbamos corriendo cuando sentí los pinchazos. Avisé a un compañero y nos paramos. Me quité la zapatilla y vi las heridas. Lo bueno es que no eran profundas”, declaró Blas López al Diario de Jaén. Tuvo bastante suerte porque, “de haber ido cuesta abajo, el daño sería mayor”, reconoce.

El calzado que llevaba ese día amortiguó la pisada y todo quedó en un fuerte susto y en unas molestias leves, hasta el punto de que pudo reanudar el entrenamiento, aunque a un ritmo bastante diferente del que llevaban hasta ese momento.