Cánovas llega a amenazar incluso con que ni el propio Lamdassem ni Merzougui, su otro pupilo internacional, vuelvan a vestir más la camiseta de la selección. “Tal vez nos dediquemos a correr pruebas populares”, declara, al tiempo que hace referencia a la posibilidad de que Lamdassem no acuda al próximo Mundial. “¡Que corra Odriozola el maratón de Moscú!”, exclama, para concluir con una contundente recomendación al entrevistador: “Pregunte cuánto cobran el presidente José María Odriozola y el director general José Luis de Carlos, por ejemplo”.

Los motivos del enfado

Son varios los motivos que han llevado a Antonio Cánovas a mostrar su enfado. Por una parte está la cuestión económica, ya que la ayuda que recibe el español de origen marroquí Ayad Lamdassem por parte de la RFEA es sólo de “60 euros al mes”, y eso que debe mantener “a tres hijos”.

Pero además hay otras cuestiones que tienen que ver con su presencia en la selección y con la preparación de sus corredores. “Yo clasifiqué a dos atletas para los Juegos de Londres y la Federación prefirió llevar a entrenadores que no tenían a ninguno, es increíble”, señala el técnico andaluz, sin olvidar que Lamdassem fue convocado “para la selección de maratón sin consultar”, y un maratón “requiere una gran preparación y significa renunciar a muchas carreras, entrenar en altura...”.

Y finalmente también ha habido discrepancias con el presidente de la Federación, José María Odriozola, a quien según Cánovas no le gusta que “le diga las cosas con franqueza, a la cara, como hice en la época de la Operación Galgo”. Al preparador andaluz le indigna que en cada competición “siempre” le saquen sangre a Lamdassem, un hombre que sabe “que es mejor quedar cuarto que tener una medalla manchada. No como otros”, acusa.