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viernes, 03 de mayo de 2024 00:01h.

El 40% de los niños no hacen ejercicio porque prefieren los videojuegos o la televisión

Cuatro de cada diez menores se declara sedentario en sus prácticas de ocio, como consecuencia del uso de videojuegos, la televisión y las redes sociales. Una circunstancia que ha provocado un aumento exponencial de la obesidad infantil en los últimos años y que afecta al 40% de la población de entre 2 y 24 años.

Foto: Ayuntamiento de Leganés

No obstante, los kilos de más no son el único problema, dado que el sobrepeso es la antesala de otras muchas complicaciones de salud propias del adulto, como la diabetes o la hipertensión arterial. De hecho, la prevalencia de esta última entre niños obesos puede superar el 30%, según se ha advertido en la 18ª Reunión Nacional de la Sociedad Española de Hipertensión-Liga Española para la Lucha contra la Hipertensión Arterial (SEH-LELHA), celebrada recientemente en Valencia.

Por ello, y con motivo de la celebración del Día Europeo de la Prevención del Riesgo Cardiovascular, la presidenta de la Sociedad, Nieves Martell, ha advertido que queda "mucho camino por recorrer" en el control de los principales factores de riesgo cardiovascular y ha recordado que los índices de obesidad y diabetes en España se han situado, "en apenas 20 años", a la altura de países como Estados Unidos o Reino Unido.

"Hay que tomar, por tanto, conciencia de que el estilo de vida que seguimos desde la niñez influye en la salud. Es fundamental no pasar por alto la importancia de empezar a educar desde la infancia en salud cardiovascular fomentando hábitos cardiosaludables, como realizar ejercicio físico a diario, ya que el sedentarismo está alcanzando cifras alarmantes, y mantener una alimentación saludable", ha insistido la experta.

Y es que los cambios en los hábitos de consumo y alimentación que se han producido en los últimos años en España, así como la creciente tendencia al sedentarismo en las actividades lúdicas, están incidiendo de manera muy negativa en la salud de los más pequeños. Por ello, según ha asegurado el experto de la SEH-LELHA, Francisco Morales, es "importante" identificar desde edades tempranas los factores de riesgo cardiovascular, como obesidad e hipertensión, porque "suelen evolucionar" hasta la edad adulta.

En efecto, estudios desarrollados en niños han demostrado que los que presentan persistentemente valores de presión arterial en los límites altos de normalidad, tienen mayor riesgo de ser hipertensos en la edad adulta pero también más posibilidades de que la hipertensión sea secundaria a alguna enfermedad.

"Si no se controla la presión arterial de estos niños, muchos de ellos serán adultos con enfermedad cardiovascular establecida. De esta forma, hay que intervenir precozmente para conseguir una mejora de la calidad de vida a largo plazo. Todo ello sin dejar de escatimar esfuerzos en la prevención", ha comentado Morales.