Sarah Reinertsen, la primera atleta con discapacidad que logró completar un Ironman
Sarah Reinertsen tiene actualmente 38 años y reside en California (Estados Unidos). Una deficiencia congénita no hereditaria provocó que su pierna izquierda jamás alcanzara el mismo desarrollo que el resto del cuerpo y le fuera amputada a la edad de 7 años, lo que no le ha impedido subir por la Gran Muralla China, escalar un acantilado gigante en Vietnam o practicar triatlón con regularidad. Una de sus mayores hazañas fue completar en 2005 el Ironman de Hawai, siendo la primera vez que una atleta amputada lograba terminar una prueba de esta exigencia.