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viernes, 29 de marzo de 2024 00:01h.

Recorrido por el Anell Verd de Barcelona: de la vega del Llobregat a las colinas de Sant Boi

El Camino Natural de l’Anell Verd es semicircular y recorre diversos ambientes, desde la ribera del río Llobregat a parajes de media montaña, pasando por poblaciones y zonas periurbanas. La ruta nos aproxima por elementos arquitectónicos relevantes, como la Cripta Güell o la ermita de San Ramón, y cruza áreas muy bien conservadas de monte mediterráneo. Tiene una longitud de 17,5 km, con un desnivel positivo de 385 m y un desnivel negativo de 346 m.

Fotos: MAGRAMA

La ruta empieza a orillas del río Llobregat, al noreste del municipio barcelonés de Sant Boi de Llobregat. El firme es de tierra y está flanqueado por una valla que protege los cultivos y por una barrera de cañas (Arundo donax) entre las que se puede ver el río. El camino es llano y continúa sin dificultad.

Se circula por un tramo con poca vegetación para, más adelante, adentrarnos en una zona con huertos y sus encañizadas a un costado que los separa del cauce de la Riera de Can Soler.

El trazado llega a una carretera de uso agrícola (B-202) y la recorre por el lateral, protegido por una balaustrada de madera que nos acompañará la mayor parte del camino y que será la mejor guía para no extraviarnos. A mano izquierda podremos observar la antigua fábrica textil del empresario Eusebio Güell, que fue mecenas de Gaudí.

 

Colonia Güell

El Camino Natural da un quiebro de 90º cruzando la carretera por un paso de cebra y adentrándose en la colonia donde vivían los trabajadores de la fábrica. Muchos de los edificios de la colonia son obra del genial arquitecto. De hecho, la ruta pasa cerca de la Cripta Güell. Vale la pena detenerse para admirarla, antes de continuar por las calles de la colonia.

Abandonamos la zona poblada por el lateral del Camí de Can Ros. Enseguida el asfalto se torna cemento y se agradece el frescor de las higueras (Ficus carica), mientras pasamos por las inmediaciones de las casas de la Masía de Llorc, desde donde hay una bonita vista de la Colonia Güell.

Continuamos la subida hasta llegar a un cruce que está en zona urbana. El Camino cambia de dirección torciendo bruscamente a la izquierda, dejando a mano derecha la masía Mas Terra Alta, y comienza una pronunciada bajada que termina al alcanzar un riachuelo, a menudo seco pero reconocible por el cambio de vegetación, mucho más frondosa. Ahí se retoma la subida, entre quejigos (Quercus faginea) y pinos (Pinus sp.), hasta alcanzar la inseparable compañía de madera que supone la balaustrada.

 

Zona didáctica de Can Palós

Pasando por la cadena que limita el acceso a vehículos a motor, alcanzamos el Camí Vell de Torrelles. Al tomarlo, se deja a un lado la finca de Santa Bárbara para continuar descendiendo, hasta encontrarnos con otra cadena que también evita el paso de vehículos a motor. Al atravesarla seguimos nuestro periplo entre las colinas de los alrededores de Sant Boi, cuajadas de pinos y masías tradicionales.

En un ensanchamiento del camino se ha habilitado una zona recreativa, llamada zona didáctica de Can Palós, junto a la Casa de Colonias del mismo nombre. Está dotada de una fuente, mesas y bancos, donde podemos descansar y tomar un refrigerio. Hay que recuperar fuerzas, porque nos esperan nuevas subidas que ascender.

Continuando la ruta, tras varios ascensos y descensos más, arribamos a una zona con espléndidas vistas sobre el valle del Llobregat y los pueblos de alrededor.

 

Ermita de San Ramón

Más adelante, una pasarela de madera nos permite salvar el desnivel sobre la carretera que enlaza Sant Boi con Sant Climent. Justo al final de esta pasarela arranca la última y más empinada subida, pero el esfuerzo merecerá la pena ya que en la cima nos esperan varias recompensas. Por un lado, unas magníficas vistas; por otro, la imponente ermita de San Ramón. Y por último, un área recreativa donde recuperarnos del cansancio.

Dada la altura a la que se encuentra, desde la ermita se divisa el mar, el Delta del Llobregat, el aeropuerto y numerosas edificaciones del área metropolitana de Barcelona. A partir de aquí, el Camino es todo bajada hasta Sant Boi. Nada más abandonar la ermita, encontraremos a la derecha el aparcamiento de la misma. Posteriormente, se puede continuar la bajada por el trecho de tierra hasta llegar al Parc de la Muntanyeta.

A la altura del kilómetro 14 se inicia el ramal de la Font de Golbes, pasando junto a la fuente que le da nombre y a un área de descanso. La ruta discurre al lado de un establo acondicionado para ovejas, que es de propiedad municipal y cuya principal función es que reduzcan la cantidad de sotobosque para minimizar el riesgo de incendio.

Ya acercándonos al final del ramal, el sendero discurre por el mismo camino de tierra pasando al lado de un pabellón de caza, la Torre de Benviure, poco antes de alcanzar un área de descanso junto a un aparcamiento, habilitado por el ayuntamiento de Sant Boi, punto donde finaliza este ramal.