En un comunicado, la universidad ha indicado de parte de los investigadores Aritz Urdampilleta Otegui, doctor en Educación en Ciencias de la Actividad Física y el Deporte, y Saioa Gómez-Zorita, doctorada en Farmacia y Ciencias de los Alimentos, que es necesario controlar la administración de fármacos que interaccionen con los alimentos ingeridos.

Entre los "principales factores limitantes del rendimiento en el alpinismo" destacan el agotamiento de los depósitos de glucógeno muscular y catabolismo proteico elevado, desequilibrio hidroelectrolítico y Mal Agudo de Montaña (MAM).

Ante esta situación de gran estrés que se vive en las altitudes elevadas y en estancias superiores a las tres semanas, según los investigadores, "se hace imprescindible una óptima alimentación". Aun así, en ocasiones el MAM en los alpinistas es inevitable y en estos casos se hace uso de fármacos para afrontar la situación.

Interacciones con los alimentos

En este sentido, los investigadores alertan de que "si no se realiza bajo un control riguroso, la suplementación puede poner en peligro la salud del alpinista por las posibles interacciones que se dan con los alimentos o ayudas ergonutricionales ingeridas".