Para ello, deberemos seguir las siguientes indicaciones, tal y como nos recomienda Jeff Galloway en Entrenamiento mental para corredores:

1. Calienta caminando durante 5 minutos, luego corre y camina suavemente durante 10 minutos.

2. Comienza a correr despacio durante 1-2 minutos y luego cronometra 30 segundos. Durante este medio minuto, cuenta el número de veces que tocas el suelo con tu pie izquierdo.

3. Camina durante un minuto aproximadamente.

4. En el segundo intervalo de 30 segundos, aumenta el número de pasos en 1 ó 2.

5. Repítelo 3-7 veces y, en cada ocasión, intenta aumentar el número de pasos en 1 ó 2.

Un equipo eficiente

En el proceso de mejorar la frecuencia de pasos, el sistema de vigilancia interna del cuerpo coordina una serie de adaptaciones que hacen que los pies, las piernas, el sistema nervioso y el mecanismo de sincronización de los pasos trabajen juntos como un equipo eficiente, de tal forma que:

- Tu pie toca el suelo con mayor suavidad.

- Se reducen o eliminan los movimientos añadidos e ineficaces del pie y de la pierna.

- Se dedica menos esfuerzo a impulsarse o a avanzar.

- Estás más cerca del suelo, por lo que sufres menos impacto.

- El tobillo se vuelve más eficiente.

- No se utilizan en exceso las zonas de dolor y molestia.