El pasado domingo comenzaba una nueva edición del Tor des Géants, una prueba circular de 330 kilómetros y 24.000 metros de desnivel positivo en la que se recorren un total de 25 puertos de más de 2.000 metros de altitud, 30 lagos alpinos, dos parques naturales y siete bases de descanso, además de atravesar las cumbres alpinas de mayor altitud, como el Mont-Blanc o el Cervino.

Cuando se llevaban poco más de 27 horas de competición, uno de los portales italianos de referencia en el ámbito de la montaña, Ski-alper, informaba de las acusaciones de un corredor sobre el hecho de que Francesca Canepa, que era una de las máximas favoritas y en aquel momento marchaba en primera posición de la clasificación femenina y en el séptimo puesto de la general, había acortado una parte del recorrido en coche.

La organización retuvo durante dos horas a Canepa en el avituallamiento de Donnas con el pretexto de iniciar una investigación para aclarar los hechos, permitiéndole posteriormente continuar la carrera hasta que se tomara una decisión oficial. Sin embargo, la corredora italiana decidió abandonar en medio de un profundo llanto. Las únicas palabras que salieron de su boca fueron recogidas por el diario La Stampa, afirmando lo siguiente: “Sé que voy a ser acusada de subirme en un coche, pero si necesitara algo así para ganar el Tor des Géants, no me hubiese inscrito”.

Sobre las 18:30 de este lunes la organización emitía un comunicado en el que confirmaba la descalificación de Francesca Canepa, aunque no por haber recortado kilómetros en un coche, sino por haberse saltado el control de Les Goilles.

“Esto se ha convertido en un circo”

Uno de los participantes que vivieron en primera persona estos hechos fue el español Salva Calvo, un clásico del Tor des Géants que también acabó retirándose por varios motivos, resumidos en una frase contundente que escribió en Facebook: “Se me hincharon los cojones de ver el puto circo en lo que se ha convertido esto”.

En una entrada publicada este martes en su blog denuncia una vez más cuestiones como la poca seriedad de la organización a la hora de permitir ayudas de ciertos acompañantes hacia algunos atletas o la falta de controles en cuanto al material obligatorio que portan determinados participantes, pero también dedica un párrafo a la descalificación de Francesca Canepa (Panetta, tal y como la llama en su escrito). Éste es un extracto de la entrada publicada en el portal:

“Y ahora Panetta. Tela con esto. Cuando yo llegué a Donnas allí estaba ella, recién parada. Le pregunté a su acompañante-entrenador qué había pasado. Me dijo que la habían descalificado por coger un coche de Cogne a Lizam (o como se escriba). Este trayecto son cuatro kilómetros que van por una senda paralela a la carretera. Lógicamente, él lo negaba. E incluso me dijo que los tiempos de paso eran normales. Pregunté a uno de la organización involucrado en el asunto y me dijo que la descalificación fue que un corredor (menudo pájaro, porque me tocó compartir carrera con él y tuvo detalles bastante feos) la vio subirse a un coche. Tócate los huevos. Y sólo tenéis esa prueba. Venga ya. El próximo año a los cuatro, ocho o veinte que vayan delante de mí voy a decir que los he visto subirse a un coche. A mí dame una prueba fiable, una foto, un vídeo, pasos de tiempo anormales, un juez de carrera... Pero un corredor, el Fabio ése que iba quinto, venga ya!!! Quiero creer que tenéis algo serio. Pero es que luego comentaban de dejarla seguir descontándole el tiempo que había estado parada. Así que yo, hasta ahora, no tengo más noticias... Con lo fácil que lo tuvieron el año pasado para pillarla. Eso sí, ya me dijo que el Tor se había acabado para siempre (bueno, depende de la pasta que pongan sobre la mesa)”.