Fuentes participó la semana pasada en el acto de inauguración de las II Jornadas de Conmemoración del Día Forestal Mundial, celebradas en el Centro Universitario de Plasencia (Cáceres). En su intervención, el responsable de Medio Ambiente explicó que la citada inversión, financiada en su totalidad por fondos europeos Feder y Feader, supone casi un 160% más que la del pasado año.

Se concreta en casi 25,5 millones de euros en obra forestal, la mayoría para trabajos de prevención de incendios y para la gestión sostenible de los montes públicos, y casi 20 millones para diferentes paquetes de ayudas, entre los que destacó la conservación de terrenos adehesados, cuya convocatoria, dotada con 15 millones, se ha aprobado este mes.

Con este gasto se realizarán en los dos próximos años, según indicó el director general, repoblaciones forestales, tratamientos selvícolas, pistas forestales, mejoras para el ganado, nuevas infraestructuras y trabajos para la lucha contra incendios.

Fuentes destacó el "empeño" del Gobierno extremeño en adoptar todas las medidas para intentar evitar que la masa forestal se queme y recalcó que la inversión en obras de prevención de incendios asciende este año a 14 millones de euros, un 125% más que en 2012.

Destino de la inversión

Este dinero se destina a infraestructuras como pistas forestales, cortafuegos, puntos de abastecimiento de agua, podas y clareos, restauración de terrenos quemados y repoblación forestal, actuaciones con las que, según dijo, se crearán en torno a 50.000 jornadas de trabajo.

Además, el director general explicó que Extremadura tiene una superficie forestal de 2.831.650 hectáreas (casi el 68% del total del territorio), de las que el 34% corresponden a dehesa (1.430.000 hectáreas), el 13% a pastizal (casi 558.000 hectáreas), cerca del 12% son bosques (512.000) y algo más del 6% es superficie de matorral (432.000). Además, hay distribuidas casi 180.500 hectáreas de montes de utilidad pública, mientras que otras 70.000 están en manos privadas.

En este sentido, Fuentes indicó que los montes públicos "deben actualizarse para mejorar este patrimonio natural, generar puestos de trabajo, prevenir incendios y obtener un aprovechamiento económico para la madera, biomasa, apicultura o caza".