La competición, que se celebrará el próximo 17 de noviembre, contará con un trazado más rápido, con la aspiración de convertirse en uno de los más llanos del panorama europeo en carreras de ruta. La principal razón para estas modificaciones se debe a la intención de la organización de revalidar la etiqueta de bronce otorgada por la Asociación Internacional de Federaciones de Atletismo (IAAF) y hacer méritos para aspirar a la etiqueta de plata.

Estas menciones permiten a los atletas catalogar a las carreras como pruebas de calidad y buen nivel organizativo.

Novedades

Las novedades más importantes se podrán presenciar en los kilómetros finales, en los que el Maratón Divina Pastora cruzará la zona del centro de Valencia para llegar a la calle Colón, Navarro Reverter, Plaza América y Jacinto Benavente, comenzando la entrada a la Ciudad de las Artes y las Ciencias.

Asimismo, los corredores ya no deberán atravesar los túneles y sus acusados desniveles, que castigaban sus piernas en los momentos clave de la competición. Como última diferencia con respecto al circuito de 2011 y 2012, en la próxima edición los 8,5 kilómetros finales son en ligera cuesta abajo, aprovechando las propias características de la ciudad, lo que favorecerá que el ritmo de carrera del atleta no se vea afectado en la recta de meta del maratón.

Valencia es una ciudad prácticamente llana, por lo que el nuevo circuito pretende evitar que el corredor pierda velocidad en sus kilómetros finales.